martes, 31 de enero de 2012

Adiós a Biblioteconomía, pero no al Blog!!!

Con este post quiero finalizar esta parte de mi blog dedicado a la asignatura de Biblioteconomía. No obstante, no me gustaría que la actividad de éste acabara aquí, ya que considero que es un medio esencial para poder expresar tus pensamientos y opiniones acerca de cualquier tema públicamente y, al mismo tiempo, puede servir, si así lo deseamos, como fuente de información para otros usuarios, ya que nuestras aportaciones quedan almacenadas en la web. Y en relación a esto último, quiero reflejar una anécdota que me ocurrió el día en el que estaba elaborando la presentación de dicha asignatura; y es que consulté una duda en el buscador de Google y a uno de los primeros enlaces que me remitió fue a uno de los artículos de mi blog, lo cual no solo me sorprendió, sino que me llenó de satisfacción, ya que gracias al descubrimiento de Blogger uno puede darse a conocer virtualmente.

El objetivo que perseguía esta última clase fue que a través de la elaboración de una presentación oral, resaltáramos aquellos aspectos de la asignatura que nos hayan llamado más la atención. Recordamos los Gestores de Referencias Bibliográficas, Google Docs, Prezi, Modelo Gavilán, etc., pero, ¿nos ha quedado a todos claro cual es el objetivo que perseguía esta asignatura? Acabas sabiendo utilizar todos estos programas, pero en mi opinión son bastante escasos los conocimientos que se adquieren referentes a la labor bibliotecaria, que es la idea que tienes cuando te matriculas por primera vez de la asignatura. Por ello, basé mi presentación en el proceso evolutivo al que se habían venido sometiendo estos espacios, la cual realicé extrayendo algunos conocimientos que habíamos ido adquiriendo durante nuestras visitas a la biblioteca de nuestra universidad o a la sección de Fondo Antiguo de la Universidad de Sevilla. También me resultó de gran ayuda la clase en la que abordamos el tema de adquisición de libros por las bibliotecas universitarias, ya que en ella, además de conocer que la mayor parte de la colección de este tipo de bibliotecas estaba integrada por recursos electrónicos, aprendimos las diferentes funciones que podemos encontrar en los catálogos virtuales. Finalmente, la experiencia en las bibliotecas durante los años de carrera, me aportaron el desenlace de dicha presentación, ya que intenté mostrar la imagen que estos espacios actualmente nos ofrecen, comparándola con la imagen tradicional.

Personalmente me ha quedado la duda de conocer más a fondo los procesos bibliotecarios y los procedimientos adoptados por estos organismos para organizar o colaborar con otras entidades en actividades culturales que promuevan la vida de las bibliotecas. Me hubiese gustado conocer qué organismos les facilita el dinero para este tipo de actos, qué cantidad suelen destinar para ello,…

No obstante, considero que es una asignatura bastante productiva, ya que aprendes a manejar programa que te facilitan asombrosamente el trabajo y además son de gran ayuda para todos los que queramos dedicarnos a la investigación.

Por último, quiero aprovechar para dar la enhorabuena a todos mis compañeros por sus trabajos, ya que cada uno ha aportado su particular manera de ver la asignatura y han reflejado perfectamente los conocimientos adquiridos, así, si en algunos teníamos alguna duda, dichas presentaciones las han solucionado.
Por lo tanto, solo me queda decir… ¡¡Hasta otra!!

A continuación adjunto un enlace de mi presentación en Power Point, para que todos vosotros podáis consultarla en cualquier momento.

C:\Users\Cibernodo.Cibernodo1.004\Desktop\Presentación Biblioteconomía. Las bibliotecas del siglo XXI.html

lunes, 23 de enero de 2012

Power Point: mi compañero de batalla

Con este post no pretendo otra cosa que sacar una lanza a favor de “Power Point”, un aliado en nuestras exposiciones orales que nos ha venido acompañando a lo largo de todos estos años de carrera, que a sido cuando la gran mayoría de nosotros lo hemos descubierto.



La última clase se dedicó al programa “Prezi”, cuya finalidad no es otra que lograr que nuestras presentaciones adquieran un grado mayor de complejidad, que no es lo mismo que sean de mayor calidad.
No quiero caer en el error de comparar ambos programas, ya que aunque su objetivo sea el mismo, sus ventajas dependiendo de cada persona pueden variar.
Por ello, voy a comenzar resaltando una de la posibilidades que para mi resultan fundamentales a la hora de realizar presentaciones con “Prezi”; y es que dicho programa te ofrece la posibilidad de almacenar tus creaciones en la nube, de manera que estés donde estés puede tener acceso a ellas desde cualquier PC con acceso a internet.
En el caso de “Power Point” te ofrece la posibilidad de presentar un tema y con la sucesión de diapositivas puedes abordar a parte otro subtema y desarrollarlo según tu antojo. De esta manera puedes presentar al público lo que quieras y centrarte en aquellos aspectos de tu presentación que precisen de más atención, desarrollando el conjunto de una manera clara. Es irremediable no decir que las ventajas que tienen el poder contar con diferentes diapositivas, no las ofrecen una sola pantalla de trabajo, en la que por muy amplia que sea y por mucha capacidad que tenga, los diferentes aspectos de tu presentación no les llega de manera clara al público, impidiendo entender así el tema en cuestión.
Power Point” también cuenta con unos vínculos que en el caso que queramos presentar nuestro trabajo a la forma “Prezi”, es decir varios subtemas subordinados a uno principal en una misma pantalla, basta con crearlos arriba de la imagen o del texto y pinchando en ello te remiten a otra diapositiva distinta, teniendo siempre la posibilidad de volver al principio.
Además, como todos sabemos, también podemos añadir imágenes, videos, vínculos a una página web, formas geométricas, e incluso podemos adjuntar imágenes animadas que haciendo un recorrido virtual por nuestra presentación nos sitúan en aquel aspecto de nuestro trabajo que estemos exponiendo en este momento.
Por el contrario, no nos proporciona la opción de almacenarlo en la nube, por lo que cada vez que tengamos que acceder a la presentación debemos echar mano de un disco duro o un lápiz extraíble. Pero si atendemos a los consejos de cualquier experto, de todo lo que hagamos en la nube guardarlo en nuestro escritorio, lo que antes se convertía en un impedimento, ahora resulta ser la misma desventaja que para todos los programas virtuales.
No obstante, si debo decir que el uso de “Prezi” nos da la oportunidad de trabajar en grupo a distancia, ya que puedes compartir tus presentaciones con otros usuarios, dándoles la oportunidad de poder editarlas ellos también, lo cual es una ventaja considerable para esta nueva forma de trabajo que poco a poco se está implantando.
Con esto no quiero que desechéis ni un programa ni otro, solo pretendo que este nuevo descubrimiento no os obnubile, y restéis importancia a nuestro programa de batalla que es “Power Point”, el cual nos ha venido ofreciendo unas ventajas que en nada tiene que envidiarles a ninguno.

No todo es plagio, pero tomemos conciencia de él.

En anteriores posts hacía mención a la desconfianza que a la docencia les causa el uso de internet, ya que no acaban de considerarlo una fuente fiable. Hemos reflexionado y dado varios consejos para considerarlo una fuente válida como cualquier otra, pero en ningún momento hemos hecho hincapié en uno de los hechos más propicios de esta desconfianza: el plagio.

Es un impedimento a la hora de aconsejarlo ya que se pone en telas de juicio la fiabilidad de las fuentes consultadas, para lo que recurrimos como remedio al Modelo Gavilán. Reflexionamos sobre la forma de considerar Internet como una fuente de información más, ya que es una base de datos inagotable y una buena herramienta para nuestros trabajos y proyectos de investigación; solo era necesario adaptarlo a nuestro modo de trabajo y sobre todo a la docencia. Pero, ¿qué solución hay para evitar el plagio, considerado un punto negro en contra de la fiabilidad en la red?

Debemos decir que no hay ningún método ni ningún modelo en sí que evite esto. La solución es parecida a la que hemos venido aprendiendo a lo largo del curso con todas las aplicaciones que hemos ido conociendo: la toma de conciencia por parte de los usuarios, y aquí quiero detenerme…

La mayoría de nosotros no somos conscientes de la transcendencia que puede llegar a tener el plagio. Empezamos a buscar una determinada información en la red y cuando encontramos aquello que buscamos o bien lo transcribimos literalmente o simplemente, en la mayoría de los casos, hacemos uso del conocido “copia y pega”, sin tener en cuenta la autoría del texto. No caemos en la cuenta del trabajo que hay detrás del texto original y lo que para mi es más importante, la pérdida de personalidad que conlleva este tipo de actos. Cuando escribimos cualquier tipo de texto reflejamos en todo momento nuestros pensamientos y/o opinión sobre algún tema, de los que solo yo soy propietario puesto que con ello reflejo mis propios conocimiento y personalidad a la hora de expresarme. Ahora bien, ¿qué consideramos plagio? Esta pregunta abre un gran debate moral en la conciencia de cada uno.

Desde mi punto de vista, la copia literal de un determinado fragmento literario se puede considerar un plagio, lo cual no quiere decir que no se deba hacer, ya que para ellos existen las famosas comillas (“) que cumplen la función de parafrasear al autor original del texto, con lo que dejaría de ser considerado un plagio.

Ahora bien, el tomar como fuente de inspiración una obra en sí, un tema musical o un diseño de moda no tiene por qué considerarse una copia, ya que estas utilizando ese mismo tema como elemento principal de tu producción, pero lo estas desarrollando de manera diferente, y al mismo tiempo puedes propiciar nuevos aspectos que aportarán a tu obra tintes de tu propia personalidad. Tomemos por ejemplo esta noticia en la que se denuncia un posible “plagio” de la periodista Ana Rosa Quintana: http://www.elmundo.es/elmundolibro/2000/10/23/anticuario/972296107.html.

En este caso se enjuicia a esta persona por tomar como fuente de inspiración la obra de otro autor, sin tener en cuenta que posiblemente en la suya se hayan abordado otros aspectos, que aunque deriven de dicha idea original, forman parte de su propia producción.

Por ello, debemos medir en todo momento la magnitud de este tipo de actos, ya que como vemos, no todos se pueden considerar plagio. Y quiero subrayar esta idea, ya que esta acusación puede afectar en la mayoría de los casos la profesionalidad del susodicho, y en el caso que hemos visto, marcarle para posteriores publicaciones.

De este modo finalizo este post: invitándoos a reflexionar sobre la magnitud que puede tener estas acciones a nivel personal, ya que tu mismo pones en entredicho tu profesionalidad y tu formación, y a nivel general, ya que la práctica del “corta y pega” tiñe de desconfianza un medio tan útil y necesario como es Internet.
Así, evitemos el plagio por nuestro bien y por el de nuestras fuentes de información, para que en un futuro nuestros trabajos tengan un mayor peso.

Google Docs, otra forma de facilitarnos el trabajo.

¿Cuántas veces hemos entrado en una web cualquiera y hemos visto que han cambiado por completo la estructura de ésta? Las reacciones por nuestra parte son inmediata y en la gran mayoría de los casos similares; al principio quedamos asombrados, extrañados, para después derivar en un profundo sentimiento de rabia ante estos inminentes cambios.

La responsable de dichas modificaciones no es otra que la ya conocida Web 2.0, cuyo propósito esencial no es otro que permitir al usuario interactuar y colaborar entre sí como creadores de contenidos, generados al mismo tiempo por otros usuarios de la comunidad virtual. Lo cual quiere decir que somos nosotros mismos, con nuestras exigencias, los que solicitamos estos cambios. Debemos tener siempre presente que uno de los objetivos principales de Internet es hacernos la vida más cómoda, y en esta tarea se encuentran continuamente miles de profesionales trabajando. Pues bien, siguiendo con dicho propósito de la Web, se ha creado el llamado “Beta Perpetuo”, con el que no se pretende otra cosa que hacer al usuario, en primera persona, partícipe de las novedades implantadas. Dependiendo del grado de aceptación por parte de la comunidad, estos cambios se implantarán definitivamente o no.

No hay más que observar las redes sociales, que continuamente estamos utilizando, cuando se ha producido alguna actualización para ver el descontento de gran parte de los usuarios. Recordemos que somos nosotros mismo los que estamos probando un nuevo modelo de estructurar la web, ¿acaso si nos dieran a probar el nuevo modelo de Audi o cualquier otra marca de coche nos resultaría tan molesto? Para una cosa somos “conejillos de indias” y para otra somos “los elegidos”. Hagan una reflexión y piensen en esto que digo antes de juzgar al responsable de dichos cambios.

En esta tarea de hacernos la vida más fácil, la Web 2.0 ha creado una nueva versión de Google Docs , un programa virtual cuya finalidad es crear documentos y almacenarlos en la red, o como también la llaman, “la nube”. Esta aplicación de Google es en todo momento gratuita y una de las posibilidades más importantes que ofrece es el hecho de poder trabajar en grupo a distancia. ¿Cuántas veces hemos tenido que posponer días de trabajo porque algún miembro del grupo no podía? Ahora se nos ofrece la oportunidad de trabajar desde casa en grupo, que aunque suene una contradicción por la red es posible. Como ocurre con todas las nuevas aplicaciones… solo hay que cambiar de mentalidad y adaptarlas a nuestra nueva forma de vida y en este caso de trabajo.

Google Docs también ofrece la ventaja de compartir el documento con los demás usuarios de la comunidad virtual y que éstos puedan valorarlo o utilizarlo como material para sus trabajos, por lo que además de beneficiarnos nosotros mismos, también estamos beneficiando a otros usuarios que ven en Google Docs una útil fuente de datos. De esta manera, si os dais cuenta, estamos también utilizando esta herramienta como almacén de documentos.

Y ya por último nos da la oportunidad de descargar nuestro propio documento de la red, y lo que es mejor, tenemos la posibilidad de hacerlo en cualquier tipo de formato, ya que esta herramienta además hace posible que un documento que está editado en un formato que no nos interesa, lo podamos subir a dicho programa y reeditarlo con otro tipo de formato.

Por lo tanto, no quiero acabar esta entrada sin invitaros de nuevo a reflexionar sobre las continuas ventajas que continuamente se están implantando en las webs, las cuales, en la mayoría de los casos, pasamos a juzgarlas sin haberlas conocido previamente. Nos solemos quedar en lo superficial de estos cambios, en la nueva apariencia de la página, pero ¿por qué no vemos a que se deben estos cambios? Recordad que muchas veces las apariencias engañan…

miércoles, 18 de enero de 2012

Exposiciones orales, ya no os temo!!


La práctica hace el dominio. Igual que cuando aprendes a leer, vas notando un avance con el tiempo hasta que consigues leer con fluidez, lo mismo ocurre con todo. 
 
Una de las carencias de la Educación en nuestro país es la práctica de realizar exposiciones orales. Se nos enseña inglés desde pequeño, ya cada vez más tempranamente informática, pero ¿qué hay de exponer en público? Al final llegas a la universidad y te entra lo que llaman “pánico escénico”, ya que es la primera vez que te pones delante de un público a explicar un tema que crees que no vas a dominar.

Yo aún recuerdo la primera vez que tuve que exponer… 


Fue un hecho puntual puesto que tenía unos doce años y como dije, en esta parte de la enseñanza, las exposiciones orales no eran ni son nada frecuentes. Realizamos unos talleres relacionados con el medio ambiente en el que había que dibujar lo que a cada uno le sugerían los parques ambientales. La sorpresa fue que ya metidos en faena viene una cámara de televisión a grabarnos y el profesor elige a aquellos que él considera que deben explicar su dibujo, y no es por alabar mi trabajo pero fui uno de los elegidos. La primera vez y delante de una cámara, ¿no os parece un buen comienzo? Las tácticas y trucos para exponer me los salté a la torera. La “m” con la “a” se dice “ma” no existió nunca, pero no solo esta vez sino durante mis cinco años de carrera. Llegan ahora y… ¡a buenas horas! 
 
Es este uno de los aspectos que los estudiantes españoles hemos tenido que ir aprendiendo por nuestra cuenta y es por eso por lo que quizás estemos más “atrasados” que estudiantes de otros países a la hora de conseguir cierto tipo de trabajo.

Poco a poco te vas dando cuenta que quieres exponer como un compañero tuyo, que a la vez que habla no permanece clavado en el sitio sino que se va moviendo de un lado a otro, lo cual te trasmite soltura a la hora de trasmitir su mensaje. Copias de un buen profesor el hecho de que al explicar se baje de la tarima puesto que eso te causa más cercanía. Ves las primeras veces a tus compañeros tocarse el pelo, la nariz o la oreja y eso hace que te distraigas y no escuches su mensaje y lo tomas como ejemplo de lo que no se debe hacer. También me ayudó bastante el preguntar al final de mis exposiciones a mis compañeros cómo me habían visto y aunque la mayoría son cumplidos, pero agradecía enormemente cuando eran sinceros, así poder corregir los fallos que ellos me habían visto. De esta manera fui adquiriendo experiencia y observando sobre todo llegué a exponer como podréis comprobar dentro de una semana

Si lo piensas fríamente te das cuenta que los nervios con solo controlarlos un poco solo los notas tú mismo, los demás ni se dan cuenta y si ya tienes la certeza de que tú eres el único que dominas el tema que estas contando, la exposición te sale medianamente bien. Obviamente para dominar el tema debes más que tener una idea, te lo debes de saber perfectamente, aunque en algunas veces tengas que echar mano del famoso guión que según dicen es un mal aliado, ya que dicen que resta puntos. Yo desde mi experiencia digo que el uso de éste, al contrario que dar una mala imagen, sirve de gran ayuda, ya que en el caso que te pierdas puedes recurrir a él, lo cual no quiere decir que estés leyendo literalmente todo el tiempo porque ya eso si que puede ir en contra de tu exposición.


El fondo antiguo de la BUS también pide un poco de atención.


La visita a los fondos antiguos (http://bib.us.es/nuestras_colecciones/fondo_antiguo/index-ides-idweb.html) de la biblioteca de la Universidad de Sevilla afloró en mí la misma sensación que se tiene cuando te pones delante de una obra cualquiera de un pintor famosísimo y conocidísimo. Y es que ver delante de ti manuscritos de tiempos inmemoriales no tiene precio.


Todo fue un cumulo de sensaciones de las cuales he decidido destacar las que más repulsa me ocasionaron, ya que un animo de crítica, siempre que sea constructiva, puede conllevar una mayor implicación y por consiguiente, importantes logros.

Los primeros eran dignos de exponer en cualquier galería de arte, ya que el mérito del escribano y del propietario del manuscrito, encargado de embellecerlo con cenefas e imágenes alegóricas, lo elevaban a dicha categoría. Pero en cuanto nos íbamos remontando siglos atrás la categoría de la obra seguía siendo la misma, en cambio su estado de conservación era deprimente. Y aquí me quiero detener…

Las bibliotecas y archivos sean del tipo que sean se encuentran en una constante lucha con las juntas de sus respectivas comunidades autónomas por conseguir las tan necesarias subvenciones. No es solo patrimonio material una casa-palacio decimonónica o una obra de arte del Museo del Prado, las obras pertenecientes en este caso a los fondos antiguos de las bibliotecas también necesitan un poco de atención y preocupación por su estado de conservación. No quiero caer en el error de valorar la importancia que para la sociedad en general tienen ambos tipos de obras, ya que considero que todas tienen un gran valor, pero si nos detenemos en esta colección podremos comprobar que además de disfrutar de la belleza de estos ejemplares también nos pueden servir como herramienta para un trabajo de investigación, por lo tanto su funcionalidad es doble.

Posiblemente esta sección de la biblioteca no le ocasione mucho dolor de cabeza a la Administración, ya que intuyo que la adquisición de nuevos ejemplares para este tipo de colección no es muy frecuente dado la dificultad que tiene encontrar en el mercado una obra de esta magnitud. Por lo tanto, y aquí ya hago un llamamiento tanto a los altos cargos como a los bibliotecarios encargados de la gestión de esta biblioteca, se podría invertir el mismo dinero en esta sección como en cualquier otra, solo que en vez de destinarlo a la adquisición de nuevos ejemplares, se podría destinar a restaurar este tipo de obras.

Creo que ya es momento de ver en los talleres de restauración obras de tal calibre que, al igual que los tapices o las esculturas, piden en un momento de su historia un poco de atención a su estado. Y digo esto porque en las últimas visitas que hice al IAPH de Sevilla no encontré ninguno de estos ejemplares… Quiero pensar que tendrían aunque fuese uno en el almacén a la espera de ser analizado y tratado.

Con esto me despido, invitando a todo aquel que me lea a que haga una reflexión sobre la importancia que tienen estas obras y su pésimo estado de conservación, y como no a visitar esta sección de la Biblioteca de la Universidad de Sevilla que para mi fue maravillosa.


Nuevas innovaciones en los catálogos de las bibliotecas universitarias.


Durante la clase de esta semana hemos podido comprobar lo enrevesado de los procesos de adquisición de los fondos bibliotecarios, pero si hay algo que una vez más me llama la atención es la innovación a la que se está sometiendo las Bibliotecas del siglo XXI.

Echando la vista atrás, se me viene a la cabeza el segundo post que publiqué en este blog, titulado “Las bibliotecas del siglo XXI”. En él hacía mención al gran avance que habían experimentado estos espacios, los cuales dejaban ya un poco al margen su monótona imagen, convirtiéndose así en lugares dinámicos cuya finalidad no es otra que lograr la interacción entre el usuario y la biblioteca en si.

Pues bien, a dicha innovación se han sumado actualmente los procesos bibliotecarios de adquisición de ejemplares y posterior catalogación
 
Aunque os suene increíble, posiblemente nuestra mentalidad no vaya en paralelo con la línea de desarrollo sobre la que cabalgan dichos espacios. En la mayoría de los casos no somos conscientes del mundo en el que vivimos. Creemos que pertenecemos a esos países que los llaman desarrollados, pero verdaderamente no somos conscientes de la realidad que nos rodea. Así, innovaciones novedosas que se acaban de incorporar a nuestra forma de vida con el único objetivo de hacérnosla más fácil y amena, pasan desapercibidas durante un largo periodo de tiempo. Tal es el caso de las nuevas actualizaciones que se han llevado a cabo en el catálogo virtual de las bibliotecas universitarias.

Como usuarios activos1 de estos espacios creemos conocer todos los entresijos y servicios que ofrecen, pero no os hacéis una idea la cantidad de funciones que nos quedan por descubrir…

En este caso hemos descubierto que también para las bibliotecas tu opinión cuenta, puesto que te ofrecen la posibilidad de opinar sobre los nuevos y no tan nuevos ejemplares de la colección universitaria, de tal manera que tu comentario aparezca en la propia catalogación del libro y además, puedes añadir etiquetas a través de las cuales los demás usuarios pueden tener una idea de la crítica del libro. https://fama.us.es/screens~S5/ratings_spi.html
 
Otra de las posibilidades novedosas que ofrecen los catálogos de este tipo de bibliotecas es el poder resolver dudas sobre la marcha. Se trata de una especie de chat en el que el usuario puede ponerse en contacto con el bibliotecario en el momento de la duda. http://bib.us.es/servicios/pregunte/index-ides-idweb.html. Obviamente este “chat” cuenta con un horario de atención al usuario, no obstante, en el caso de que ya no esté disponible siempre se podrá enviar la duda en cuestión a través de un correo electrónico, el cual será reenviado con la duda resuelta.

También podemos encontrar dentro del catálogo virtual de las bibliotecas universitarias otro servicio de formación al usuario, en el que se ofertan cursos impartidos por la propia biblioteca, lo cual suena bastante interesante para todo aquel que como yo estemos interesados en este tema. http://bib.us.es/aprendizaje_investigacion/formacion/index-ides-idweb.html.

Y ya por último también se ha incorporado una nueva y, desde mi punto de vista, interesantísima funcionalidad. La llaman “Los repositorios institucionales”, que consiste en una base de datos que crean dichas bibliotecas para almacenar los proyectos de investigación tanto de profesores como alumnos, con el objetivo de cumplir la misma función que un manual, una monografía o un recurso electrónico más. http://bib.us.es/aprendizaje_investigacion/publicar_citar/edicion_electronica-ides-idweb.html#repositorios
 
Después de todo esto solo puedo decir… ¡¡¡A seguir descubriendoooo!!!





1 Usuario activo: es el usuario que interactúa con la biblioteca, al contrario que el pasivo que solo hace uso de su función básica (sala de lectura)

martes, 17 de enero de 2012

De mayor quiero ser bibliotecario... (Visita)


¿Quién de ustedes no ha quedado sorprendido con la labor de bibliotecario después de haber visto los procesos de adquisición de la colección? Para ser honesto y disculpen mi ignorancia, jamás podría imaginar que ser bibliotecario tuviera tanta faena.

Hasta ahora los envidiaba por el puesto que tenían, ya que a simple vista no se les ve nunca tan ajetreados. Cuanto más es cuando salen del mostrador para colocar los libros en el sitio que les pertenece. ¿Qué hay ahora del mito de “cuando sea mayor yo también quiero ser como ellos”? Pues bien, a partir de la visita a nuestra biblioteca lo que fundamentalmente he aprendido es a valorar sus funciones y a considerar su trabajo como cualquier otro.

Lejos de limitarse a desactivar libros y a organizar la colección, su tarea es muchísimo más compleja. No es tan sencillo como encargar libros de nueva edición o reeditados según su antojo…

En primer lugar, el bibliotecario es, como dijimos anteriormente, el encargado de seleccionar en algunas ocasiones si el libro es apropiado para la colección. Y digo en algunas ocasiones porque dependiendo de la forma de adquisición se puede prescindir de su labor o no. No es lo mismo seleccionar el material perteneciente a una colección privada que seleccionar el material procedente de otra biblioteca universitaria, como recordemos que ocurrió con el traslado de la Biblioteca de Derecho a la antigua pirotecnia, en el que la labor de selección recayó principalmente en los profesores de los distintos departamentos. No obstante, por regla general, el bibliotecario siempre tendrá un papel primordial en cualquier tipo de selección.

En segundo lugar, es el encargado de catalogar los distintos ejemplares adquiridos, ya sean en soporte digital o en papel. Toda nueva adquisición se pasaría a registrar en soporte electrónico, variando ésta según los datos que nos aporte, como pueden ser: autor/s, lugar y fecha de edición, editorial, etc. Pero no creáis que sea tan simple como ir completando tal cual la información que el programa de catalogación nos pide… Todos esos datos que hacíamos mención antes deben ser registrados en “Formato Mac”, el cual se basa en códigos con el que se pretende aislar al propio libro. Dicho formato tiene un carácter universal, por lo que tiene la ventaja de poder ser utilizado en cualquier parte del mundo. Es como si vayas donde vayas hablaran tu mismo idioma, ¿no es increíble…?

Y en último lugar, se encargaría de asignarles un número en concreto a los nuevos ejemplares, lo que se conoce como el ISBN, el cual sirve para identificarlo dentro de la colección bibliotecaria. Aunque no será éste el único número identificativo del libro, ya que a nivel particular vendrá marcado con una cifra con la que se podrá identificar dentro del mercado, ésta es el ISSN. Es decir, se le atribuyen dos “matriculas”, una para que el bibliotecario lo identifique dentro de una colección bibliotecaria y la otra para identificarlo dentro de cualquier tipo de colección. Pero si para nosotros hay un número que nos resulta primordial a la hora de localizar el libro en una biblioteca, ese no es ni el ISBN ni el ISSN, sino la signatura topográfica. Dicha signatura es un código que el bibliotecario asigna al libro compuesto por tres o más elementos: colección (la pegatina de color), número de clasificación, código de autor o de título, año de publicación, volumen y ejemplar. En el caso de los recursos electrónicos, el código de la asignatura topográfica se sustituye por un enlace. 
 
Pero si hay una duda que me abordaba desde el minuto uno que entré por las puertas de las oficinas es el saber qué medios de seguridad le ponían a los libros para evitar robos y por consiguiente considerables pérdidas. Puede quedar bastante simple mi inquietud, pero si que es verdad que desde que entre por primera vez en una biblioteca me suponía que cualquiera puede sacar un libro y quedarse tan ancho. Me llamó la atención que dicho sistema de seguridad no cuenta solo con el código de barras, ese famoso que si se les olvida desactivarlo en el mostrador te pita y pone a la mayoría de la biblioteca en alerta, sino que además colocan en el interior del libro una especie de barra transparente imantada, que evita que en el caso que se deshagan del código de barras, el libro siga activado.

De esta manera y para concluir puedo seguir diciendo, pese a todo, que “cuando sea mayor yo también quiero ser como ellos”, porque me encanta!!!

Pdta.: siento no haber plasmado en este post una reflexión como se pedía, pero veía oportuno detallar la labor del bibliotecario tal cual lo he hecho, solo así creo acercarme más a la idea quería reflejar.

La biblia para los cibernautas: Modelo Gavilán


Bien merecería una apartado en el manual de instrucciones de un router cualquiera, ya que su importancia así lo requiere. Estamos hablando ni más ni menos que del “Modelo Gavilán”, el cual nada tiene que ver con una novela de televisión ni nada parecido, sino con un útil método para comprobar la fiabilidad de las fuentes consultadas en la web.

Así a primera vista puede pasar desapercibido e incluso llegar a parecernos algo innecesario, puesto que para algo se cuenta con la famosa política de privacidad y protección de datos. Pues bien, además del control del contenido debería ser de obligado cumplimiento a la hora de consultar una página, la fiabilidad que ésta nos ofrece. El hecho de publicar una determinada información, dentro de los límites de la legalidad, no es nada difícil, pero ¿quién controla la fiabilidad de dicha información?

Al igual que un plagio en una monografía o manual pone en telas de juicio no solo al autor del libro, sino a la editorial en general, así se debería juzgar a determinadas páginas webs. 
 
Normalmente cuando consultamos un libro nos encontramos con la correspondiente bibliografía, notas a pie de página, fecha de publicación, autor/s, etc., por el contrario cuando buscamos en google o en cualquier otro buscador una determinada web nos vamos directamente a la información que nos interesa, sin detenernos a evaluar la fiabilidad de ésta, tal y como hacemos con cualquier ejemplar.

Ahora bien, mi pregunta es: ¿qué nos lleva a ser tan críticos con un tipo de fuente y tan benevolente con otras? Como dije en posts anteriores, la información obtenida de internet es acogida con cierto rechazo dentro de la comunidad universitaria por no ser del todo “fiable”, sin embargo a la hora de buscar en la web nuestra aduana particular desaparece. Nuestros controles de calidad se vuelven de los más subjetivos en el mundo virtual. Por lo tanto, debemos concienciarnos y aplicar nuestro espíritu crítico con cualquier tipo de fuente que utilicemos, ya sea en papel o un recurso virtual.

Una vez que hemos tomado conciencia de la importancia que tiene dicho análisis pasemos a poner en marcha el anteriormente mencionado Modelo Gavilán. 
 
La página web que someteremos a examen será la siguiente: http://www.andalucia.org/flamenco/

En cuanto a las características de esta página podemos decir que se encuentra sujeta a la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía, la cual pretende establecer un punto de encuentro entre viajeros y profesionales del turismo o los viajes y que ésta funcione a modo de escaparate para todo lo relacionado con el turismo de Andalucía. Dicha finalidad se encuentra perfectamente detallada al final de la página.

Ni que decir tiene que es una página que busca en todo momento un fin lucrativo, ya que promociona, como dijimos anteriormente, principalmente el turismo y en este caso, la cultura andaluza reflejada en el flamenco, como bien podemos observar en los diferentes anuncios y ofertas que la patrocinan.

Para contactar con la empresa pública encargada de gestionar dicha web solo tenemos que pinchar en el vínculo de “contacto” y posteriormente se desplegará una ficha a rellenar con nuestro nombre, e-mail y el mensaje que queramos enviar, además para cumplir con lo establecido con la Ley de Protección de Datos de Carácter Personal y su normativa de desarrollo, también debemos constatar que somos mayores de 18 años, que queremos recibir información de la Empresa Pública encargada de la Gestión del Turismo y Deporte de Andalucía y que consentimos la cesión de nuestros datos a dicha Consejería. No obstante, el autor o autores de los textos nunca aparece referenciado en ningún lado, es anónimo, lo cual nos lleva a reconocer que la veracidad de la información no proviene en ninguno caso de dicha empresa.

El dominio de la página es “http”, lo cual nos está queriendo decir que es una página bastante fácil de encontrar y sobre todo fiable.

Para corroborar su fiabilidad y dinamización, la web se encuentra perfectamente actualizada, puesto que dispone de un calendario en el que se muestran los eventos turísticos que ofrece la comunidad.
En cuanto a la estructura de ésta, los contenidos se presentan en diversa forma: una introducción encabeza la página, la cual habla en este caso del flamenco en Andalucía, realizando un breve paseo por su historia y orígenes. Quiero resaltar el vocabulario empleado por el autor, totalmente accesible a cualquier lector tanto hispanohablante como extranjero. Además, también cuenta, como dijimos anteriormente, con un calendario que nos informa de los eventos relacionados, varios enlaces RSS, un gráfico de nuestra comunidad, etc.

De este modo, podemos decir que la página que habitualmente visito cumple a la perfección las normas de fiabilidad que rigen el Modelo Gavilán, un método que desde mi punto de vista debería ser de obligado cumplimiento tanto en los “centros tic”, como en cualquier tipo de enseñanza virtual.